El masaje descontracturante consiste en un masaje manual en el cual conseguimos a través de diferentes técnicas aliviar contracturas y normalizar el tono muscular.
Esfuerzos leves pero repetidos con gran frecuencia pueden superar la capacidad de adaptación del músculo y desencadenar una contractura. Aunque cualquier músculo es susceptible de sufrir una sobrecarga, los más afectados son los trapecios (cuello, hombros y parte superior de la espalda) los músculos del cuello, el tríceps sural (parte posterior del brazo) y los paravertebrales de la columna (desde la base del cráneo hasta la zona sacra).
Los masajes descontracturantes ayudan a liberar sustancias llamadas endorfinas, hormonas que actúan como los antidepresivos naturales del organismo y que generan en los seres humanos emociones positivas de bienestar y nos ayudan a combatir el dolor.